¿Que puedo hacer con mis, si es que existen, habilidades de escritor? ¿Como puedo encausarlas hacia un medio que me de verdadera satisfacción y le sirva tan siquiera de diversión a los demás? El WeBlog es un inicio, pero me gustaría llegar más allá de los monólogos autocompasivos. ¿Como dejar de sentirme inseguro de mis propios pasos en el siempre cambiante mundo de las letras?

Como ya dije: me gustaría terminar alguna historia, me gustaría ser editor de alguna revista, ser cronista o reportero para alguna publicación, terminar algún análisis filosófico de la realidad o sencillamente adquirir un sentimiento de realización a partir de mis textos. Necesito dejar de lamentarme. Necesito escapar de mis propias cadenas; abrir mis alas y lanzarme a la aventura de la "literatura". ¿¡Pero que digo!? Si desde el momento en que tomo la pluma y comienzo a garabatear mis pensamientos en el papel estoy viviendo la "literatura". Lo que realmente me hace falta es aceptarme como soy. Dejar esta auto-censura que me impongo desde el subconsciente y he venido afirmando iba a abandonar desde textos pasados. ¿Quien dice que desde ahora tu pluma no esta grabando en tinta la narración que querías realizar? El di aro de un pobre escritor inseguro sumergido entre las dudas de la existencia que en algún momento de este periodo luminoso llamado vida atormentan a todo ser humano.

Curiosa selección de palabras la mía; "atormentan" quiero decir. Como puedo considerar como negativa las preguntas que representan la vida misma. Vivir es cuestionar; ¿Que cosa? ¡Preguntarse que debe preguntarse, desde luego!

Aquel que con seguridad de estar sin error recorre los senderos de la vida existe un plano con más peligro que quien abraza sus propias incertidumbres. Amar los errores, ser uno con los miedos, llorar tras los fracasos... eso es la vida. Y yo sigo caminando sin rumbo, avanzando por los interminables senderos sin destino alguno. Pero... eso era lo que buscabas; ¿No? Liberar tu entidad abstracta sin diluir de una forma legible y coherente. Conocer la parte de ti que no conocías, escribir por la satisfacción misma del escribir, no por el propósito y la recompensa de la finalización.

La letra mi paga. Sentir el placer de una oración o el dolor cortante de punto y a parte. Cuando alcance tal estado de consciencia que mi creación literaria se transforme en una extensión de mi ser, cuando estas palabras salgan del papel o el monitor para adquirir una forma tan palpable El reconocimiento de otros es un medio, no la meta. Para lograr la comunicación se necesita un receptor y como método expresivo la literatura guarda una intima relación con aquellos que hacen "suyo" el mensaje.

Soy un egoísta, todo ser humano lo es, pero como auto-proclamado "escritor" he alcanzado el grado más alto de la antipatía. ¡Imagínense! El considerar tus propios pensamientos lo suficientemente importantes como para ofrecerlos de lectura a los demás. ¡Imperdonable! Soy de quienes creen que el papel tiene más filo que la espada. Por sobre el reino de lo físico las ideas se levantan y penetran mas allá del tiempo y el espacio,

¿Me considero digno de tener a mi control de un medio capaz de darle forma nueva al mundo cuando es empleado a plenitud? Nadie tiene derecho a esgrimir tan poderosa capacidad. El "lenguaje" nos empuña a nosotros, no nosotros a el. Me refiero a que somos herramientas de ese "Yo" literario que por sobre las leyes de la física y la lógica existe en una simbiosis con el arte de la palabra, resguardado muy adentro de nuestra personalidad. En un nivel muy superior a la comunicación, la literatura es, como todo el arte, la forma más pura de expresión. O al menos debería serlo.

Esuchando Ahora: "November" de Azure Ray