¡Hace tanto tiempo que no escribía! Ya necesitaba soltar mi corazón en el papel y alimentar mi pluma con ideas y sentimientos. La literatura es una criatura golosa que nunca se sacia y continua eternamente consumiendo sin piedad las mentes de los inocentes escritores que desconociendo su verdadera naturaleza le hacen el amor apasionadamente y dan vida a hijos hermosos que nacen del pecado y llenan de luz las bibliotecas y dan forma a lo que conocemos como humanidad. ¡Horrible oración de longitud espantosa! ¡Maldita deformidad del lenguaje que refleja mi propia estupidez! Odio aquello que me representa. ¿Quién soy? ¿Qué soy? Repetidas preguntas sin respuesta que me atormentan. No puedes dejar de sufrir en esta vida donde el placer no es más que un corto momento luminoso en un mar de sombras. ¡Pero que hermosa es esa carencia momentánea de dolor! Una eternidad es un beso, una caricia y un abrazo. ¿Qué me pasa? ¿Qué me falta? ¿Me falta algo? Auxilio pido a quienes ignoro. Ayuda clamo a los que fingen no verme. Recursos narrativos y analogías ficticias. Vidas que terminan y muertes que principian. Rima en prosa y metáfora en lírica. ¿Por qué me lees? ¿Valgo la pena tu esfuerzo? ¿Me disfrutas? ¿Me entiendes? Tachón, borrón y cuenta nueva. Redundancia que sobraba. Palabras que no deberían existir. ¿Cómo hacer valer mi ruinosa existencia? ¿Qué sentido le daré a lo que han sufrido aquellos que me rodean?

Salí de mi hogar y pude olfatear el dulce olor de los roles de canela que vendía la vieja Inés es su puesto de la esquina. ¿De donde vino la oración anterior? Directo del subconsciente y de mis deseos supracientes. Hay tantas cosas que desearía tener ahora mismo. Todo hombre necesita de metas si quiere darle sentido a su vida; pero las mías son tan ridículas... ¡Calla insolente! Mande, dije yo. ¿Quién eres tu para hablarme así, si se puede saber? No tiene importancia, me contesto. Tengo el derecho de hablarte agresivamente porque tú te has comenzado a discriminar primero. Los sueños son tan insignificantes como tú quieras que estos sean. Déjate llevar por tus deseos: cúmplelos y disfruta a tu propia persona. Por más diminutos y absurdos que sean, son todo lo que te queda. ¿A quien intentas engañar? Solo a mí y a nadie más.

Esuchando Ahora: "The World is Naked" de Supercar